¿Qué entendemos por...?

Infancia y adolescencia

La Organización Mundial de la Salud, define la infancia como el período de mayor vulnerabilidad del ser humano, comprendido desde el desarrollo prenatal hasta el inicio de pubertad. La adolescencia es el periodo de crecimiento y desarrollo humano que se produce después de la niñez y antes de la edad adulta, entre los 10 y los 19 años. Se trata de una de las etapas de transición más importantes en la vida y se caracteriza por un ritmo acelerado de crecimiento y de cambios.

Grupos vulnerables

De acuerdo a la Comisión de Atención a Grupos Vulnerables, son personas o grupos que tienen características de desventaja ya sea por edad, sexo, estado civil, nivel educativo, origen étnico, situación o condición física y/o mental; y requieren de un esfuerzo adicional para incorporarse al desarrollo y a la convivencia.

Experiencias adversas

Las Experiencias Adversas Tempranas (ACE, Adverse Childhood Experiences) se refieren a eventos traumáticos experimentados por niñas, niños y adolescentes menores de 18 años edad, tales como: maltrato físico o psicológico, abuso sexual, negligencia, ser testigo de violencia intrafamiliar, consumo de sustancias por parte de un miembro de la familia, separación o divorcio de los padres, enfermedad mental o encarcelamiento de un miembro de la familia (Felitti, 1998). Investigaciones posteriores complementan estas categorías con factores sociales, tales como extrema pobreza, bulliyng escolar y violencia social (Finkelhor, 2015). Estudios internacionales (Hughes et al. 2017) han demostrado que las experiencias adversas tempranas se asocian a rezago en el desarrollo infantil, trastornos de la salud mental y enfermedades físicas, entre otras dificultades. La importancia de estos hallazgos ha llevado a definir las ACE como un foco relevante de la prevención en salud y de las políticas públicas.

Abuso y maltrato en la niñez y adolescencia

De acuerdo a Unicef el abuso o maltrato en la niñez se refiere a niños, niñas y adolescentes menores de 18 años que sufren ocasional o habitualmente actos de violencia física, sexual o emocional, sea en el grupo familiar o en las instituciones sociales. El maltrato puede ser ejecutado por omisión, supresión o transgresión de los derechos individuales y colectivos, e incluye el abandono completo o parcial.